lunes, 17 de noviembre de 2014

Balancín del miedo y "los falsos positivos"


Dejo las ofensas y la codicia en el balancín del miedo
El impulso agresor también nace en el balancín del miedo y en el poder seductor que segrega el advenimiento del terror. Es en ese vacío intermedio, en esa materia dislocada y pletórica de rencor, donde Caín dejó su palabra escrita. Es el lugar de la sospecha y el impulso ciego, ciénaga que acumula los impulsos del corazón y los deja escorados y en putrefacción. Es un marjal de almas que forman la estación del reposo, actúan en la descomposición final y acoge como fantasía el Hades hipotético. Allí hace una oscura pausa que adormece los sentimientos y pone final a todas las quimeras humanas.
Es la permanente paz de los camposantos…
En el departamento del César (Colombia), en las llanuras del Caribe, tierras de Caín colindante con Magdalena, se encuentra el marjal de los rencores más asombroso de los últimos tiempos. (Las pozas de los verdugos de Álvaro Uribe: ver los hechos ocurridos en San José de Apartadó), Él hizo la norma de la matanza, puso un precio por cuerpo entregado, sean de la guerrilla o de cualquiera que “dificulte el camino de la democracia”. El hallazgo fue de espanto e hizo visible más de 140 fosas comunes y cementerios clandestinos... Estos “cementerios sin nombre” eran dispuestos para arrojar allí a las víctimas de los paramilitares y miembros del ejercito. Las víctimas eran mayoritariamente estudiantes, dirigentes campesinos y víctimas de la venganza oscura. A estas entregas indiscriminadas, ejecutados sin garantías judiciales y sin procesos de investigación, se les llamaba "falsos positivos".
No penséis que la maldad de Caín queda en un solo bando: las FAR han mantenido una guerra sucia durante 50 años, han llenado las selvas y la montañas de cadáveres y se han ayudado y mantenido con el narcotráfico, una manera más sutil de matar. MATAR, no sólo a los jóvenes de Colombia, si no de la manera más perversa, manejar el cruel propósito de extender la muerte haciendo dinero con ello...
Esta batalla parece lejana, “no nos pertenece”. Nada más equivocado, nuestros jóvenes también toman partido ante las armas o el uso del aliento del diablo. Las drogas están en las puertas de nuestros colegios, las venden aquí y se consumen en occidente y al hacerlo se matan y ayudan a matar...
http://es.wikipedia.org/…/Esc%C3%A1ndalo_de_los_falsos_posi…



No hay comentarios:

Publicar un comentario