miércoles, 15 de enero de 2014

Catedral de Mallorca







Catedral de Mallorca

Tras la “conquista” de Mallorca, fue el rey Jaime I de Aragón el que ideó derribar la antigua mezquita (la Medina Mayurca) para construir un templo mariano. La obra se inició en 1229 en el reinado de Jaime II y se prolongaron hasta 1600 sin contar las intervenciones de Gaudí, Jujol y M. Barceló.... El templo consta de una planta de tres naves sin girola ni crucero. Pertenece y sigue las características del gótico levantino, es decir un salón majestuoso a la manera alemana. En la nave mayor está ubicada la capilla de la Trinidad, donde se ubicaron las tumbas reales; Jaime II y Jaime III.
Destacan en la Catedral el gran rosetón festoneado de luz y color, los contrafuertes en las fachadas laterales, la puerta Mayor y la puerta sur o “Mirador”, donde Guillermo Sagrera decoró con esculturas de gran belleza el tímpano y el pilar central. También la torre; aunque no destaca en altura dispone de un total de 9 campanas, una de ellas, "N'Eloi" sobresale por sus dimensiones: 2 metros de diámetro y 4.517 kilos de bronce.
Destaca el aspecto externo donde los vacíos y llenos de los contrafuertes y arbotantes crean una imagen compactada, muy diferente a como es vista desde el interior, donde se tiene una percepción diáfana y admirable del espacio.
El templo esta formado por tres naves de diferentes alturas y rematadas con capillas escalonadas de perfil rectangular.
Los altos pilares dividen el espacio y forman las tres naves en una sala espaciosa. Estos ascienden hasta recibir los nervios de la crucería formando la bóveda de manera limpia. La diferencia de altura entre nave principal y las laterales permite la abertura de estrechos y estilizados vitrales por donde entra la luz inundando el lugar con las caricias del sol.